Una hoja de papel, que estaba sobre una escribanía junto a otras hojas iguales a ella, se encontró un buen día, completamente manchada por unos signos. Una pluma, bañada en una negrísima tinta, había escrito en ella multitud de palabras.
- ¿No podías ahorrarme esta humillación? dijo enojada la hoja de papel a la tinta. Me has ensuciado con tu negro infernal, me has arruinado para siempre.
- Espera le respondió la tinta. Yo no te he ensuciado, te he revestido de palabras. Desde ahora ya no eres una hoja de papel, sino un mensaje. Custodias el pensamiento del hombre. Te has vuelto un instrumento precioso.
En efecto, poco después, ordenado la escribanía, alguien vio aquellas hojas esparciadas y las juntó para arrojarlas al fuego. Pero de pronto advirtió la hoja "sucia" de tinta: y entonces tiró las demás y devolvió a su lugar la que llevaba, bien visible, el mensaje de la palabra
Imagen: papeldetintanegra.blogspot.com
Como se llama el autor de este cuento
ResponderEliminarMe gusta muchísimo este cuento aparte de corto muy lindo se los recomiendo
ResponderEliminarPitoooooooo
ResponderEliminar